miércoles, 9 de enero de 2013

EN TORNO AL NACIMIENTO DE AFRODITA




  
Gonzalo Gamio Gehri


Desde todo punto de vista, Afrodita es una diosa fundamental en el panteón griego. Su nombre es invocado por los asaeteados por los dardos de Eros, y no olvidemos que ella tuvo una participación decisiva en los acontecimientos que narra Homero en La Iliada. Su origen es tan enigmático como el que se atribuye al propio Eros.

 Su nombre proviene de áphros, “espuma”, precisamente porque una de las historias más sorprendentes alude a que surgió de la espuma del mar. Desembarcó primero en Citera, una pequeña isla. Cuenta la leyenda que su encanto era tal que donde pisaba brotaban flores y plantas, y que por donde caminaba la acompañaban gorriones y palomas. Las hijas de Océano la adornaron para que Afrodita encontrara un lugar para que su culto sea establecido. Pasó por Esparta;  si bien el pueblo lacedemonio le rindió culto de inmediato, ella pensó que quizá esa tierra de feroces guerreros no entendería completamente los asuntos azarosos del eros (cuya poderosa complejidad y profundidad Platón discutirá en El Banquete). Finalmente fijó su hogar en Chipre. Por eso los devotos de Afrodita la llaman  Cipris.

Fascinado por el poder que de Afrodita manaba, Zeus reclamó la paternidad de la diosa. Adujo que él y Dione – la dividinad del roble - eran sus padres, por eso los dos mitos coexisten en el mismo culto, aquel de la diosa que surge de la espuma marina, cuya belleza e inspiración afirma el Orden sobre el Caos - a la manera de Eros -, y el que la señala como hija de Zeus. Incluso no ha faltado quien sugiriera que se trataba de dos manifestaciones de la diosa. Ya en los fines del medioevo, Boticelli  pinta El nacimiento de Venus, que recrea brillantemente el momento en que Afrodita, surgida de las aguas, es vestida y adornada por la Primavera y las oceánidas. El espectáculo del surgimiento de Afrodita sigue conmoviendo el ánimo de los mortales que, perplejos, siguen pronunciando su nombre.


2 comentarios:

Equinoxe dijo...

Qué sabe usted, maestro, de Afrodita porné??

Gonzalo Gamio dijo...

Un templo en Pafos, me parece. No había oído de ella, la verdad.