sábado, 21 de mayo de 2011

FUJIMORISMO NUNCA MÁS








Gonzalo Gamio Gehri




La Coordinadora Nacional de Derechos Humanos viene impulsando desde hace unos días la campaña Fujimori nunca más, una iniciativa ciudadana que pretende hacer memoria en torno a la funesta política sistemática que implementó el régimen autoritario de Fujimori en materia de lesión de derechos y restricción de libertades, cuyo descubrimiento, investigación y judicialización han llevado a la cárcel a las cabezas de la organización, incluidos Vladimiro Montesinos, Nicolás Hermoza y Alberto Fujimori. La actitud condescendiente y silenciosa de los sectores más conservadores de la política, la prensa, los grupos empresariales y otras instituciones sociales frente a estos delitos execrables – en nombre de la “estabilidad económica” y de sus propios intereses – ha motivado que la Coordinadora haya recogido una cantidad significativa de material audiovisual que da cuenta, a través del registro de los hechos y del testimonio de las víctimas, de la década autocrática y corrupta que padecimos los peruanos en los años noventa.

Es una lástima que estos vídeos no salgan en TV, pero es una situación previsible si tomamos en cuenta que todos los canales han decidido no ofrecer información completa ni promover la pluralidad o el rigor en la formación y emisión de opinión; se han alineado detrás de la candidata Fujimori, cubriendo sus mítines y sesiones de tecnocumbia, editorializando a su favor, y presentando una cobertura recortada de las actividades de su contendor (p.e., el caso de Canal N ante la Juramentación de Humala). La prensa nacional está desempeñando un rol lamentable en esta segunda vuelta electoral. Como sostiene un colega, antes la prensa se vendía, pero hoy - aparentemente - se regala. Esta actitud parece corroborar la validez de la investigación elaborada por La Primera acerca de la implementación del “Plan Sábana”, una operación montada con el fin de asegurar un segundo régimen fujimorista en el Perú, que convocaría a la prensa, ciertos grupos de poder económico y al propio gobierno. Lo más extremista de la prensa está ya afilándose los dientes; ya los gansos salvajes que desde la prensa fujimontesinista se dedicaron a difamar a la CVR en los primeros años de este decenio deslizan - en esos diarios, en sus blogs y en otras oscuras alcantarillas -la idea de que la supuesta izquierda que califican de "caviar" y de “cívica” es ideológicamente afín al terrorismo; sin duda, están aderezando el festín macartista en lo que puede convertirse en una nueva cacería de brujas. Esa es una postura que la facción más conservadora del país asumió frente a los defensores de los derechos humanos durante el conflicto armado interno y que parece reeditarse en diferentes espacios; véase el caso de las amenazas e insultos que ha recibido Rocío Silva Santiesteban en la última semana. Algunos fujimoristas han ensayado el argumento absurdo e infantil de que los activistas de derechos humanos actuarían movidos por el "odio y el rencor"; lo que buscan es verdad y justicia, e impedir que el circuito de injusticia, silencio e impunidad que acompañó al fujimorismo se reinstale en el Perú. La segunda vuelta está polarizando al país y está desatando hostilidad e intolerancia entre sus protagonistas. La verdad es que hasta el Presidente de la República interviene en la campaña dejando entrever sus simpatías y reparos, violando el principio de neutralidad que exige su investidura. Hace bien la Coordinadora – vituperada mil veces, ayer y hoy, por lo más retrógrado de nuestras presuntas “élites” – en recordar lo que significó el sombrío fujimorato en lo que a derechos humanos, corrupción y autoritarismo se refiere.

Pero a los propios fujimoristas el inconsciente los traiciona sin remedio. Hace dos días, el hoy ex vocero de Fuerza 2011, Jorge Trelles, dijo ante cámaras que “ (los fujimoristas) matamos menos”, reconociendo tácitamente los crímenes cometidos por el régimen y convirtiendo el tema de la violación de la vida en un mero asunto de cifras. El desprecio por los peruanos que lleva implícito esta escalofriante frase es evidente. Es así como piensan los políticos en actividad que sirvieron al fujimorismo, que avalaron la impunidad de los perpetradores desde posiciones de poder y que anhelan el retorno de ese régimen. Es el mismo desprecio que entraña el clientelismo que practican en la campaña en curso, pretendiendo cambiar víveres y regalos por votos. La presencia de Alberto Fujimori en cada movimiento que hace su hija y su entorno político más próximo es inobjetable, tal y como La República ha demostrado rigurosamente. La campaña de Keiko Fujimori cuenta con la dirección o la asesoría del reo de la DIROES. Los camiones entran y salen, con la anuencia (y acaso con la complicidad) de las autoridades.

Estas evidencias en torno a los hechos del pasado y del presente, así como estas actitudes de indolencia y crueldad ante las víctimas hacen imposible que muchísimos peruanos podamos votar por los Fujimori. No lo haremos. No podemos avalar la crueldad, el saqueo del bien público, la intimidación y la impunidad. Lourdes Flores ha dicho que “es más fácil luchar contra una dictadura local que contra un proyecto internacional”. Yo creo que es más difícil combatir contra una dictadura mafiosa experimentada que contra un posible nuevo gobierno con un altamente discutible espíritu democrático y liberal. Un nuevo gobierno fujimorista sólo tendría que reactivar la siniestra red mafiosa que construyó en los noventa (para muestra un botón: ¡Los seis ministros de economía que tuvo el fujimorato han sido procesados o condenados por corrupción!). Esa red le permitió perpetrar ejecuciones extrajudiciales, depredar las arcas del Estado, comprar conciencias y medios de comunicación, negociar con las FARC y posiblemente con el narcotráfico (¿Alguien recuerda el episodio del avión presidencial repleto de cocaína?), así como esterilizar, por la fuerza y con engaños, a mujeres inocentes. No, esa cúpula de poder no se puede volver a instalar en el país. No podemos transmitir ese mensaje de impunidad a las próximas generaciones. Como dice sabiamente mi buen amigo Alfredo Elejande, por el Doctor Mengele no se puede votar.

48 comentarios:

Alfredo P. dijo...

La izquierda peruana y sus oenegés parece que han hecho suyo el lema de "para mis amigos todos y para mis enemigos...los derechos humanos".
Desde los años de la CVR de la izquierda a comienzos de la pasada década, no era tan evidente la instrumentalización política de los DD.HH al servicio de los intereses de la izquierda.
Después lloriquean cuando la gente no se interesa en los DD.HH.

Anónimo dijo...

Lo de contabilizar muertos o trasgresiones de lo DDHH empezó con el amigo Ernesto de la Jara (IDL) que en su columna comentaba “Y en relación a la violaciones de derechos humanos de Madre Mía (punto para mí el más sensible), se puede invocar que -mas allá de que el juez San Martín haya sido el que cerrara el caso, pudiendo haber mandado una mayor investigación- del lado del fujimorismo hay un millón de Madres Mías”. Es decir el candidato atentó contra los DDHH y el entorno de la otra candidata también lo hizo, pero no ella (sin comentar el entorno montesisnista de Humala con Salomón Lerner y militares en retiro a la cabeza).
Tal vez por este sesgo de las ONG deciden no publicar los videos, tal vez deban pagar para publicarlos. Aunque sea dicho que canal N si pasó algunos videos y testimonios de estos grupos.

JSB

Gonzalo Gamio dijo...

Hacer memoria respecto de lo que vivimos no hace daño, Alfredo. Ni siquiera a tí, que no pareces objetar el record funesto del fujimorato.

El dilema parece claro: votar por Humala - en el peor de los casos - constituye un salto al vacío; votar por los Fujimori implica saltar a una cloaca letal.

Alfredo P. dijo...

Es que parece que la "memoria" de la izquierda sólo llega hasta 1990 y se olvidan del catastrófico modelo estatista y socialistoide que imperaba en el país en los 80s y que nos llevó a la ruina, mismo modelo económico que busca implantar el nacional-humalismo.
Yo me preocupo por el futuro y no vivo de odios y rencores del pasado.

Gonzalo Gamio dijo...

Aunque no lo creas, yo también estoy contra el estatismo y abrigo una preocupación similar. Sin embargo, la perspectiva de condenar a mi país a un régimen mafioso como el de los Fujimori me resulta inaceptable.

Gonzalo Gamio dijo...

Hola JSB: No. Los primeros fueron Rey y Giampietri, regateando el número de muertos y desaparecidos contra la CVR. La candidatura de Keiko Fujimori sí es responsable de violaciones de DDHH. Su entormo político colaboró con el fujimorato (y con Montesinos) y firmó la ley de amnistía, y ella fue primera dama en aquel tiempo. Los sucesos de Madre Mía han sido objeto de una investigación judicial, y estaremos alertas si aparecen nuevos indicios. Quien apoya a Humala es Salomón Lerner Ghitis, homónimo del ex presidente de la CVR, hay que precisarlo para no inducir a una confusión, involuntaria pero nefasta, al lector.

Saludos,
Gonzalo.

Anónimo dijo...

Evidentemente yo me refería al conteo de muertos en la actual campaña, entiendo que Rey también utilice esta macabra y despreciable justificación pero tampoco seria el primero ya que Julio Cesar y supongo que algún personaje mas anterior a él contabilizaba los muertos. De todas maneras las pruebas de Madre Mía están ahí, hasta Ernesto de la Jara lo comenta y hay testigos presenciales que apuntan hacia Humala, hablan incluso de pago de dinero para callar bocas. Si todo esto no fuera cierto habría que enjuiciar a estos testigos por difamación.

En cuanto a Salomón Lerner estas en lo correcto pero no consideré necesaria la aclaración por el nivel de los lectores de tu blog.

JSB

Gonzalo Gamio dijo...

Hola JSB:

Estoy de acuerdo.

saludos,
Gonzalo.

Alfredo P. dijo...

"Para mis amigos, todo; para mis enemigos ....los derechos humanos" bonita moral la de las oenegés derechohumanistas.

Gonzalo Gamio dijo...

Bueno, no pertenezco a ONG alguna, y la exigencia de respeto a los derechos humanos se aplica a todos.

Raúl D.C. dijo...

¡Qué manera de distorcionar la historia! Es evidente que las pasiones ideológicas llevan a reescribir el pasado. Dibujas al fujimonorismo como si hubiera sido la Camboya de Pol Pot, la Cuba de Castro, la Alemania de Hitler o la URSS de Stalin. Fujimori mas bien sacó al país de un espiral de caos por la violencia terrorista y la crisis económica. Se corrompió rápidamente, pero el pueblo lo apoyó porque lo vió como una salida frente al desastre de políticas demgógicas promovidas por políticos que Humala admira y por la total inoperancia de los caviares de la época. La clase política del pasado también fue corruptísima pero no había videos para documentarlo (el Velascato fue corruptísimo y abiertamente dictatorial, el gobierno de Belaunde 2 estuvo lleno de escándalos que nunca fueron esclarescidos, incluyendo a Elías LaRosa y Manuel Ulloa; y qué decir del gobierno de Alan 1). Que no se hagan los justos.
Acá se debe optar por el mal menor, no por un bien. En este caso yo creo que Keiko será el mal menor. Garantiza, más que Humala, una continuidad en las elecciones y genera menos desconfianza económica. De ninguna manera será Pol Pot como la dibujan ustedes. Humala sí podría ser Chávez, Evo o Correa.
Lerner Guittis es una pésima influencia en Humala, así como Javier Diez Canseco.

Gonzalo Gamio dijo...

Hola Raúl:

Todas las dictaduras en su momento justificaron su existencia en la "lucha contra terribles males", y todas fueron en su momento "populares". A mí me repugnan por igual las dictaduras de izquierda y las de derecha.

El régimen de Fujimori se parece en algunas cosas al de Pinochet, en otras al de Chávez. El entorno de Keiko Fujimori es el mismo que depredó el país en los noventa. La candidatura de Humala - con todas las dudas del caso - presenta mayores gestos de concertación.

Saludos,
Gonzalo.

Raul D.C. dijo...

Si algún otro candidato hubiera llegado a la segunda vuelta con Keiko (PPK, Castañeda o hasta el inefable Toledo) hubiera coincidido contigo en "Fujimorismo nunca más". Pero así como voté por Alan a pesar de haber conducido uno de los peores gobiernos de toda la historia, votaré ahora por Keiko. Ni Alan ni el fujimorismo se merecían regresar, pero frente a un nuevo Velasco, claramente representan un mal menor. Además, así como Alan 2 no fue Alan 1, K. Fujimori no será A. Fujimori. Y Humala no ofrece mayores garantías de democracia. Por lo menos no hasta que Chávez siga en el poder en Venezuela.

Gonzalo Gamio dijo...

Hola Raúl:


Digo lo mismo. Hubiera preferido a casi cualquier candidato sobre Humala, menos los Fujimori. Repito: es el mismo entorno siniestro que gobernó en los noventa.

La amistad de Chávez y Fujimori es conocida (aunque hoy solapada). Y la afinidad de sus gobiernos es notorio.

Saludos,
Gonzalo.

Anónimo dijo...

Ante todo, mis respetuosos saludos al autor y a los participantes. Sigo este blog desde hace un buen tiempo, y quizá sea este un momento adecuado para hacer la siguiente reflexión.

El diálogo que el profesor Gamio ha generado en este espacio era, digamos hasta hace unos meses, o hasta antes de las elecciones municipales, sumamente técnico. Muchos posts eran bastante difíciles de leer para quien no está familiarizado con el estilo de la discusión académica en el ámbito de la filosofía tal como se la practica en nuestro país. Es éste un estilo que podría sonar árido por su aparente desapego y su tecnicismo; árido por lo que para el lego podría parecer poco pensamiento propio y poca referencia a la realidad. Entiendo que esto (una cierta aridez que algunos legos podemos percibir en cierto diálogo filosófico académico local) se debe a la posición periférica y en todo sentido subordinada de nuestra "filosofía" - cfr. Schopenhauer, Sobre la filosofía en las universidades, en Paraerga y Paralipomena, y Spinoza, Tractatus theologico-politicus, para más señas. Digo esto sin ánimo de ofender a nadie - todos estamos incluidos en los muchos niveles de autocensura que funcionan para que finalmente cuidemos muchísimo lo que decimos, y aún los partidarios de la ortodoxia más radical (que han expresado tantas opiniones en este blog), aunque emplean a veces un lenguaje más descarnado y parecen manejar influencias de estilos más directos provenientes de otras latitudes, parecerían sin embargo considerar que lo que digo es cierto, aunque su llamado no es a una mayor sinceridad en la generación y expresión de lecturas propias y originales, sino más bien justamente a la necesidad de que el ciudadano de a pie, contra lo que trató de defender el buen Spinoza, no pueda hacer y expresar lecturas políticas y religiosas propias (respetuosamente rogaría a unos y otros me corrijan o me ayuden a entender mejor la situación).

En el Perú todos tenemos miedo y todos mantenemos niveles de perfil bajo que tienen por objeto, entre otras cosas, la supervivencia. Nuestra organización, a todo nivel, es genética y culturalmente premoderna. Espero que propios y ajenos compartirán, con diversos sentimientos al respecto, este pequeño juicio al que me atrevo, para cerrar el preámbulo y antes de pasar al comentario en sí.

(continúa)

Anónimo dijo...

Lo que quiero decir es lo siguiente:

La coyuntura electoral genera datos (en hechos históricos sumamente acelerados y en aclaración de posiciones personales y de grupos sociales) que normalmente el diálogo filosófico en el Perú escamotea, y esta situación coyuntural podría permitir que el diálogo técnico al que me refería antes (aquel que a algunos parece árido por momentos) de pronto diera un salto hacia adelante enriqueciéndose con lo orgánico, pero por supuesto, manteniéndose en el plano de lo técnico. Y, en cambio, como quizá sería de esperarse, lo descarnado de la coyuntura, que desnuda posiciones y realidades, hace distraer la mirada de la filosofía misma, es decir, del tema de fondo, a mi humilde entender.

Lo que sugeriré a continuación es una pregunta muy incómoda, que realmente invita a repensar muchísimas cosas, y que me imagino no tiene solución hecha. Sonará a cada polo del espectro como invitando a pensamientos ajenos a sus propias ideas, quizá. Por lo menos es sólo una pregunta.

¿No será que todos los caminos llevan a Roma, y que detrás de la coyuntura está una tendencia más bien general (inconsciente, por supuesto, en muchísimos casos, y por lo tanto difícil de tomar en cuenta para muchos filósofos) a cancelar las libertades de la modernidad, por efecto pendular? Un blog opuesto a éste cuestiona la ironía de la sangre vertida en la Revolución francesa en nombre, entre otros temas, de la fraternidad. Hay deudas que la modernidad ha acumulado y que los signos de los tiempos parecen indicar podrían estar cada vez más cerca a ser cobradas... La existencia de la gran marea que tiende a llevarnos a una segunda Edad Media parece clara en muchos síntomas y aún expresiones abiertas, y aunque parecería venir sólo de sus partidarios y no de sus detractores, aquí podría resultar pertinente la reflexión de Schopenhauer: quizá un atento examen de ciertas teorías políticas que marcaron a la modernidad, incluidas las que sirven de base en nuestro medio a muchos defensores de los derechos humanos, muestra que la mayoría de éstas tienen componentes poco "democráticos", muy en el fondo premodernos en algún sentido... o por lo menos ambiguos y con una historia de aplicaciones y consecuencias contrarias a las libertades individuales. Pienso en Hegel particularmente, pero el tema daría para larguísimas reflexiones, quizá para una revisión completa de la historia de la filosofía.

Revisión que, por cierto, el ámbito especializado peruano no facilita particularmente, y que el buen gusto manda no intentar, al menos no en público.

(continúa)

Anónimo dijo...

Los defensores de los derechos humanos que se oponen al totalitarismo pero tienen a Hegel como base, hacen grandes esfuerzos para soslayar el hecho de que el proyecto hegeliano parece culminar justamente en un Estado con características absolutas (y que esto es ambiguo e invita al malentendido por decir lo menos). Pero, por favor, ruego a los hegelianos presentes no condenarme aún; mi intención con este comentario es de concordia y de honesto deseo de entender mejor a todos, porque creo que en este momento lo indispensable, como muchos señalan, es aprender a convivir mejor y no agravar las polarizaciones, sino solucionarlas en la medida de lo posible, para bien de todos. Por supuesto, esto implicaría dialogar y llegar a entendimientos, no soslayar hechos e ideas en forma edulcorada ni infantil.

Inmediatamente debo reiterar que (como dije más arriba y como espero resulte obvio) soy aficionado a la historia del pensamiento pero no filósofo profesional, y por lo tanto, por ejemplo, no he leído casi nada de la obra de Hegel. Sin embargo, he escuchado a varios profesores explicarla... y por ejemplo encuentro en un artículo de Axel Honneth esta frase del filósofo: "...en la constitución del Estado lo que se denomina crimen alevoso, traición y crueldad no tiene la significación de algo malo, sino la del que está en paz consigo mismo" (Hegel, Jenaer Rechtsphilosophie, citado por Honneth en La lucha por el reconicimiento, Barcelona, Crítica, 1997, p. 78). Honneth dice a continuación, "Los mismos fundamentos que en el primer paso de su análisis Hegel aduce para explicar la emergencia del Estado, esos mismos son los que trae a colación para fundamentar la organización monárquica del Estado. Hegel no puede concebirla sino en una persona singular, el monarca hereditario debe presidir por ello el gobierno representativo". (Se podrá decir que antes de empezar a entender esto debo pasar por dos o tres lecturas de la obra de Hegel, pero esto me produce cierta desconfianza justamente porque, si así fueran las cosas, la única manera de dialogar con ideas hegelianas sería convertirse en discípulo de Hegel... o, peor aún, todo diálogo sobre ideas estaría de plano vedado a personas que se dedican profesionalmente a disciplinas distintas de la Filosofía, lo que nuevamente podría sonar en algún sentido contrario a la libertad del pensamiento y disuasivo para el ciudadano que intenta comprender en forma racional por qué las cosas son como son. Sócrates no pedía diplomas, ni aún lecturas, a sus interlocutores). Creo que estas citas, escogidas y explicadas por el profesor Honneth, que parece conocer muy bien la obra de Hegel, ofrecen suficiente material para una pregunta legítima sobre la posibilidad de estar el totalitarismo implícito, al menos en forma de riesgo, en el pensamiento de Hegel, y sobre la posibilidad de que la influencia de este filósofo haya encontrado y encuentre terreno fértil en personas y grupos con intenciones totalitarias (de manera no planificada por él, advertiría acaso el Platón del Fedro).

(continúa)

Anónimo dijo...

La posibilidad a la que estoy apuntando podría tener que ver con aquello que dice el Zohar, "Yo he puesto todas mis palabras en tu boca". ¿No será que el Logos del proyecto humano, en general, contiene la semilla y por lo tanto implica el proceso, no sólo de toda la Historia, sino de lo que a continuación se nos viene, sea lo que sea? ¿No será que todos los caminos en efecto llevan a Roma, y que lo que viene a continuación está implícito en más sitios de lo que parece? ¿No será por eso que la gran mayoría de las personas va a aceptar lo que venga manteniendo el necesario perfil bajo, o defendiendo la situación abiertamente? Y no me refiero a lo que se viene en el Perú, que es un simple episodio coyuntural en un país periférico. Me refiero a lo que se viene en el mundo, de lo que lo que aquí suceda hoy podría no ser más que un síntoma.

Es esta, lo reitero una vez más, la inocente pregunta de un lego que ha dedicado unos años a escuchar el debate que aquí tiene una de sus formas de expresión, en este caso a cargo de profesionales de la Filosofía (perdónenme la alternancia de mayúscula y minúscula en el uso de esta palabra, a veces hablo de la especialidad y a veces de la de Sócrates). Creo que mi pregunta invita a ver filosofía detrás de lo que está sucediendo, a repensar por sus frutos elementos múltiples en la historia del pensamiento, y a construir análisis que pueda ser útil, en los próximos años, para mejores lecturas de la realidad tal como - al parecer, inevitablemente - habrá de desenvolverse... a nivel nacional e internacional.

Chacalito dijo...

¿Este anónimo se ha fumado un troncho? ¿De qué estás hablando? Acá se está discutiendo sobre las elecciones del 5 de junio y los peligros que representan ambos candidatos y programas. Acá no sé está planteando si los seguidores de Hegel son totalitarios o no o sobre los contenidos antidemocráticos de la modernidad y la pre-modernidad. Dicho sea de paso, ni Humala ni Keiko deben tener idea de quien es Hegel ni qué es la modernidad Desviar el tema central con reflexiones etéreas no es más que una forma de evadir la realidad (por no decir algo más grosero). Es una vana disquisición no exenta de una petulancia disfrazada de erudición.

Anónimo dijo...

Lo único cierto es que Keiko quiere liberar a su padre, convertir palacio en su cárcel y el 2016 Kenji al poder!!! luego saldrá con que es japonés, parecemos el patio trasero de unos ponjas, hasta en el exterior se sorprenden por no decir se burlan, de que puedan creer en el pseudo discurso de Keiko despues de todo lo que pasamos en los 90, trato de pensar que son los jóvenes que no vivieron aquellos funestos días en el Perú en los cuales tuve que dejar mi patria, es muy lamentable y la derecha enquistada en el poder no quiere dejar su mamadera entonces es el trabajo pulpo de los medios de comunicación que como títeres tratan de confundir al pueblo, lo que algunos ignoran es que... el pueblo no es tonto, pues ni si quiera han dejado sus corruptas oficinas para conocer el Perú profundo el cual Arguedas llamo el Perú de todas las sangres, el cual hasta detestan pues si de viajar se trata sus destinos preferidos son el extranjero; Con keiko continuara el país corrupto, es mas... regresara doblemente potenciado, regresaran todos aquellos que están encarcelados, su mejor corruptela, pues la peor corrupción es la de los mejores todo esto sin hablar de DDHH y para ser imparcial, con Humala es ir a ciegas pero prefiero ser un ciego a ser un indigno, así que... Por memoria y dignidad Fujimori nunca más!!!

Pd. Viva el Perú Carajo a pesar de la M de gobernantes que tenemos debemos estar mas unidos que nunca, como compatriotas que somos para salir de esta encrucijada en la que el único se apellida Toledo.

Anónimo dijo...

Estimado señor Chacalito:

El comentario explica justamente, en forma sutil, lo que está detrás de "los peligros que representan ambos candidatos y programas" (cito exactas sus propias palabras). El comentario explica detenidamente que no son los dos candidatos lo peligroso, ni lo que ponen en el papel (los programas), sino los sistemas totalitarios y antidemocráticos que cada uno representa para el bando opuesto: Para los que temen a Humala, el peligro es el totalitarismo chavista, que viene del totalitarismo marxista, que viene de alguna manera de Hegel, aunque éste no tenga la culpa (se lo resumo así para ayudarle a entender el asunto). Para los que temen a Keiko, el peligro es la famosa dictadura fujimorista, y todo lo que hay detrás del aparato político-económico del fujimorismo que casi seguramente se reactivará en julio de este año, y que encontrará por ejemplo una Ley Orgánica del Poder Ejecutivo que ya está aprobada y ha sido hecha a su medida, cortesía del presente gobierno (nadie teme a la pobre Keiko, que es a todas luces inocente). El sistema dictatorial fujimorista es, para quienes le temen, una suma de totalitarismos combinados a la criolla y esta vez ultraformalizados (entre otras cosas por el aporte de Keiko, justamente por ser inocente y por tener una elevada educación formal hecha íntegramente en el "Primer Mundo"), con componentes que recuerdan a la España de Franco, al Chile y la Argentina de los regímenes que irrumpieron en los años 70, y a cosas peores también. Ahí por supuesto que no hay tanto Hegel como, digamos, Maquiavelo, para empezar. Pero también hay Goebbels, y, como digo, cosas mucho más horribles, inconscientes en los políticos que dan la cara y no por ello ausentes del funcionamiento de los sistemas que ellos representan (no inventan, sino representan). Por supuesto que el comentario no tocaba sólo a Hegel: Hegel, en realidad, es lo de menos, es el bueno de la película. El comentario, ubicado en un blog de Filosofía, trata de ofrecer un punto de partida que anime a repensar los afluentes, las tradiciones que (aunque los políticos que dan la cara lo ignoren) nutren el debate actual y la situación estructural actual de la política y el poder en el Perú.

Lo lamento, pero este es un blog de filosofía, y por lo tanto el comentario está dirigido a los filósofos, que son aquí el público que me resulta más interesante. El comentario espera respuestas filosóficas, aplicadas a lo político, como dice el tema del blog desde el encabezado, que le invito a revisar. El comentario, además, aclara que yo no soy filósofo, y que trabajo en algo completamente diferente, de manera que no implica que sólo el tono filosófico formal que uso aquí sea el único bueno (yo llamo árido a ese tono que usted llama petulante, lo que es parecido, sólo que yo soy más delicado que usted). El tono que estoy usando, al margen del aspecto técnico, es además lo que la formalidad y las buenas maneras mandarían, a mi juicio, en una situación así de delicada. No se trata de una discusión entre barras de fútbol, aquí se juegan cosas serias con graves consecuencias, y esto se debe, en gran parte, al totalitarismo que cada bando teme en el bando opuesto, lo que exacerba la polarización y vuelve extremas las posiciones, las "reacciones". Pido disculpas si mi actitud le parece pedante a alguien, he indicado ante todo que me siento más ignorante en el campo de la Filosofía que muchos de los filósofos que han participado en este blog en los últimos años.

P.D.: Por supuesto que no fumo tronchos, como usted sugiere, lo que me parece muy gracioso. Invito a los especialistas (a los filósofos y a los aficionados a la filosofía, insisto) a decir si creen que el análisis que propongo muestra el poco rigor y la ausencia de orden y seriedad que caracteriza a una persona bajo los efectos de algún psicotrópico. Y a ofrecerme sus comentarios sobre el tema, los que escucharé con mucho interés.

Cesar Zarzosa Gonzalez dijo...

Hola Gonzalo:

El comentarista Raul DC, nos cuenta que otros gobiernos fueron corruptos. Se parece a esta logica del fujimorismo de decir que otros gobiernos tambien mataron y ellos menos. Osea que como todos roban, yo tambien. Ese tipo de comentarios es lamentable, y sirve solo para justificar actos iliticos propios o ajenos, con supuestos fines pragmàticos. Como dijeron por ahi, algunos viven este proceso con una "absoluta suspension de la moral".
Ellos tambien, se encuentran en un permanente estado de excepcion....

Y por supuesto, estamos juntos. No a la opcion corrupta de los noventa.

Un abrazo,

CZG

Raul DC dijo...

César,

No manipules mis palabras. No justifico la corrupción. Sostengo que muchos de los que se rasgan las vestiduras no son inocentes del pecado que denuncian con aire de fariseos.

Lerner Guitis (ex-socio de Joy Way) es corruptísimo y es uno de los articuladores de toda la campaña Humalista. No hay inocentes en esta campaña. Hay que optar por el mal menor y luego estar atentos a fiscalizarlo.


De otro lado sugerir, como lo hace Gonzalo, que Keiko está más cerca de Chávez que Humala es ridículo, no resiste ningún análisis.

Saludos,

Raul

Gonzalo Gamio dijo...

Raúl:

Has leído muy mal lo que yo he dicho. He dicho que existen muchas coincidencias entre los gobiernos de Chávez y el de A. Fujimori.De hecho, ante la inmundicia de lo sucedido en el 2000, sólo Chávez apoyó al dictador.

Saludos,
Gonzalo.

Russell dijo...

Discuten sobre lo epidérmico del problema. ¿No se dan cuenta que los dos candidatos en realidad son títeres de oscuras fuerzas que se van a plegar al ganador? Una de ellas es el sionismo criollo representado por Siomi,Gadsky y otros más.
Soy pesimista. Ninguno de los dos candidatos tiene la solvencia moral ni la capacidad para resistir estas influencias malignas.

Anónimo dijo...

Estimado señor Chacalito:

El comentario largo que precede al suyo, y sobre el que usted se expresa en forma tan tajante, explica justamente, en forma sutil, lo que está detrás de "los peligros que representan ambos candidatos y programas" (cito exactas sus propias palabras). El comentario explica detenidamente que no son los dos candidatos lo peligroso, ni lo que ponen en el papel (los programas), sino los sistemas totalitarios y antidemocráticos que cada uno representa para el bando opuesto: Para los que temen a Humala, el peligro es el totalitarismo chavista, sumado a una vuelta al totalitarismo velasquista, y ambos vienen del totalitarismo marxista, que viene de alguna manera de Hegel, aunque éste no tenga la culpa (se lo resumo así para ayudarle a entender el asunto). Para los que temen a Keiko, el peligro es la famosa dictadura fujimorista, y todo lo que hay detrás del aparato político-económico del fujimorismo que casi seguramente se reactivará en julio de este año, y que encontrará por ejemplo una Ley Orgánica del Poder Ejecutivo que ya está aprobada y ha sido hecha a su medida, cortesía del presente gobierno (esto advierten algunos que temen a Keiko, y por lo menos la ley existe y se promulgó sin que nadie se de cuenta). Nadie, creo, teme a la pobre Keiko, que es a todas luces inocente, pero el sistema fujimorista es (para quienes le temen y lo consideran un sistema dictatorial muy bien diseñado y con mucha experiencia) una suma de totalitarismos combinados a la criolla en su momento, y esta vez ultraformalizados (entre otras cosas por el aporte de la misma Keiko, justamente por ser inocente y por tener una elevada educación formal hecha íntegramente en el "Primer Mundo"), con componentes que potencialmente recuerdan a la España de Franco, al Chile y la Argentina de los regímenes que irrumpieron en los años 70, y a cosas peores también. Ahí por supuesto que no habría tanto Hegel como, digamos, Maquiavelo, para empezar, y sólo por ejemplo. Pero también, dicen, hay Goebbels, y, como digo, cosas mucho más horribles, que serían inconscientes en los políticos que dan la cara y no por ello ausentes del funcionamiento de los sistemas que ellos representan (ojo, no inventan, sino representan). Por supuesto que el comentario no tocaba sólo a Hegel: Hegel, en realidad, es lo de menos, es por comparación el bueno de la película. Pero, ojo, tampoco es una vía tan suelta de huesos, no es, digamos, un camino liberal, por lo poco que entiendo y por lo que veo en muchos de sus partidarios (los nuevos políticos, al respecto ver el artículo del profesor Gamio, en http://gonzalogamio.blogspot.com/search?q=blogs+de+filosof%C3%ADa ).

El comentario que no gustó a usted, señor Chacalito, se ubica en un blog de Filosofía, y trata de ofrecer un punto de partida que anime a repensar los afluentes, las tradiciones que (aunque los políticos que dan la cara lo ignoren) nutren el debate actual y la situación estructural actual de la política y el poder en el Perú.

(continúa)

Anónimo dijo...

Lo lamento, siendo éste un blog de filosofía, el comentario estuvo y está en mi por mi parte dirigido a los filósofos, que son aquí el público que me resulta más interesante. El comentario sigue ahí (es largo, sí, es para quien tenga tiempo y ganas) y espera respuestas filosóficas aplicadas a lo político, como dice el tema de este blog tal como figura en el encabezado, que le invito a revisar. El comentario, además, aclara que yo no soy filósofo, y que trabajo en algo completamente diferente de la Filosofía, de manera que de ninguna manera creo que el tono filosófico formal que uso aquí y en este caso sea el único bueno (yo llamo "árido", impostadamente desapegado, a ese tono que usted llama petulante, lo que es parecido, sólo que yo soy más delicado que usted). Le aseguro que no es este el único tono que sé usar. Pero, al margen del aspecto técnico, es el tono que la formalidad y las buenas maneras mandarían, a mi juicio, en una situación así de delicada. No se trata de una discusión entre barras de fútbol, aquí se están jugando cosas serias con graves consecuencias, y esto se debe, en gran parte, al totalitarismo que cada bando teme en el bando opuesto, lo que exacerba la polarización y vuelve extremas las posiciones, las "reacciones". Pido disculpas si mi actitud le parece pedante a alguien; he indicado ante todo que me siento más ignorante en el campo de la Filosofía que todos los filósofos profesionales que han participado en este blog en los últimos años.

P.D.: Por supuesto que no fumo tronchos, como usted sugiere, lo que me parece tan pintoresco como el apodo con el que usted se identifica. Invito a los especialistas (a los filósofos y a los aficionados a la filosofía, insisto) a decir si creen que el análisis que propongo muestra el poco rigor y la ausencia de orden y seriedad que caracteriza a una persona bajo los efectos de algún psicotrópico. Y a ofrecerme sus comentarios sobre el tema, los que escucharé con mucho interés.

Por ejemplo, estoy seguro que la conversación con el señor Russell sería muy interesante, porque yo no creo que mi comentario sea epidérmico en el sentido que él menciona, sino todo lo contrario, y creo que coincido con su diagnóstico al menos como posibilidad (y en los peores escenarios voy incluso mucho más lejos, aunque no puedo asegurar que uno u otro escenario se materialice necesariamente en el futuro).

También coincido con el señor Russell en que pocos están leyendo las cosas en su verdadera profundidad y en todas sus dimensiones; hay una suerte de epidemia de ceguera representada, en su peor expresión, por ciudadanos como el señor Chacalito, y en su mejor acepción, por respetables académicos también. Esta epidemia se presta también a sospechas, porque parece por momentos demasiado perfecta, demasiado bien construida. Los que temen a Keiko dirían que Goebbels no hubiera organizado mejor la coyuntura actual. Los que temen a Humala también parecen aterrorizados, por razones bastante similares en el fondo (véase el término "electarados", por ejemplo).

Chacalito dijo...

Oye anónimo, te respondería lo mismo que Chiabra le dijo a Rey en un debate en RPP pero lamentablemente Gonzalo no permite publicar esas cosas. No se entiende lo que dices con tu lenguaje tan enredado. Aprende a decir las cosas con claridad. Métete en la cabeza que la rigurosidad no se identifica con el floro confuso. Eso de las fuerzas oscuras que tú y Russell plantean es una cortina de humo para no discutir todo lo que sale a la luz en los dos candidatos. Mira, mejor has menos elucubración y más datos concretos. Y “Chacalito” no es un término pintoresco sino un apodo puesto por mis amigos.

Russell dijo...

Insisto y coincido con el anónimo (y a Chacalito le digo que estoy justamente refiriéndome a lo que él reclama: los problemas de amnos candidatos). Hay fuerzas oscuras y muy poderosas que han jugado y se han beneficiado con todos los gobiernos incluyendo a Velasco, los gobiernos de García, Fujimori y Toledo. Han estado con Montesinos y luego con la democracia. Han jugado para la izquierda y para la derecha, para el nacionalismo y para el imperialismo. Su única bandera es la plata y manipulan la opinión pública e inclusive las de los intelectuales a su antojo. Ahí está la verdadera inmundicia que tanto repudia Gonzalo. La mayor parte de los actores políticos (salvo honrosas excepciones) son sólo títeres de esta mafia compuesta por dos o tres grupos de poder que no sale a la luz. Es muy similar a lo que muestra ese excelente documental "Inside job": los protagonistas de la crisis económica estadounidense han tenido altas posiciones en todos los gobiernos (incluyendo el de Obama) y nunca son sancionados.

En este sentido les digo de nuevo que soy pesimista en el caso peruano.

Russell dijo...

Me olvidaba... como se deben imaginar, mi voto será nulo...

Gonzalo Gamio dijo...

Estimado Anónimo:

Sólo una cosa sobre Hegel. Tu lectura pone un énfasis desmedido en un supuesto "autoritarismo" hegeliano que popularizó cierto marxismo y que es harto discutible. Hegel defendió a inicios del s. XIX una monarquía constitucional de corte liberal-comunitario. El problema ético-político fundamental era el de la encarnación de la voluntad libre. El príncipe sólo pone el punto sobre la "í", dice Hegel. No tiene nada que ver con esos reaccionarios neoteístas y monarquistas absolutos de trono, altar y cuartel, que vemos por aquí en la red. El asunto es que muchos entre ellos no saben nada de Hegel, pero lo mencionan a menudo. Escribiré sobre ello pronto. Hegel era un progresista en múltiples temas, como se destaca en la "Fenomenología".

Hegel (particularmente su ontología de la historicidad) es una de las fuentes - con Montaqgne, Mill, Tocqueville, Dewey y Berlin - las fuentes del liberalismo de izquierda que pretendo defender.

Saludos,
Gonzalo.

Anónimo dijo...

Estimado profesor Gamio:

El aroma que percibo cuando aparece una masa de personas portando banderas vagamente hegelianas y negando el pensamiento individual es un aroma que nunca he percibido en sus clases, las cuales son un verdadero ejemplo de respeto a la libertad de pensamiento y as libertades individuales, y jamás lo he percibido este aroma en su blog, que es una defensa heroica de la libertad bien entendida (al punto que los señores reaccionarios, que así se llaman ellos mismos, lo toman muy a mal). Este aroma tampoco lo he sentido en esos señores reaccionarios; en ellos siento cosas mucho más temibles.

Se trata más bien de un aroma que percibo en bandadas de jóvenes inocentes que no creo lo perciban ellos mismos. Empecé a entenderlo (y a tranquilizarme) cuando leí Sobre la filosofía universitaria (Über die Universitäts-Philosophie), de Arthur Schopenhauer, publicado en sus Parerga und Paralipomena, en 1851. Sobre la filosofía universitaria es una queja (desmedida, desesperada incluso) contra la poca separación entre iglesia y estado y contra la intromisión de valores religiosos en la educación y en la filosofía.

La lectura de este texto de Schopenhauer suele ser disuadida en las universidades de nuestro medio, por obvias razones, aunque por ejemplo Vicente Santuc lo recomendaba en el contexto particular de su curso de Nietzsche. Se trata de un escrito contemporáneo a Hegel (previo, yo diría, a todo marxismo), que suele desestimarse de un plumazo diciendo que Schopenhauer "respiraba por la herida", pues después de polemizar con Hegel en la universidad de Berlín empezó a dictar al mismo tiempo que él, resultando sus clases un fracaso rotundo, mientras el público colmaba las de Hegel y el éxito de este último era abrumador. Tal argumento (lo que dice Schopenhauer no vale mucho la pena porque respira por la herida) es exactamente el mismo que Keiko usa contra Vargas Llosa, y es falaz, para usar un término técnico.

No necesito decir que Schopenhauer también es acusado de totalitarismo, y que su discípulo, Nietzsche, fue utilizado de mala manera por el régimen nazi, tal como Wagner lo fue. Justamente, todos los ríos van a dar en la mar de la miseria humana; precisamente, como digo, todos los caminos parecen conducir a Roma. Pero Nietzsche, y Schopenhauer (y seguramente Hegel, a pesar de sus más confundidos seguidores), valgan verdades no estuvieron involucrados ellos mismos en ningún tipo de proyecto totalitario, sino que tuvieron cosas que decir y las dijeron, y valdría la pena que los mejores las expliquen, porque la mayor parte de la humanidad suele estar ocupada en marchas ciegas hacia la supervivencia colectiva y la guerra permanente, que no creo puedan ser portadoras, ni buenas expresiones siquiera, de lo que los filósofos han tratado de expresar en su paso por este mundo.

Quedamos a la espera de la lectura de Hegel que usted nos ofrece, pues todo buen hombre merece una defensa cuando su obra es usada para fines distintos de los que él tenía en mente cuando la escribió. A falta del filósofo para defender su logos escrito, como diría el Sócrates del Fedro, que desestimaba la escritura, no viene nada mal que otro filósofo lo defienda por él.

Anónimo dijo...

P.D.: Creo que debo decir además que Sobre la filsofía universitaria, de Schopenhauer, es ante todo una decepcionada protesta contra los inevitables errores y malentendidos que supone la institucionalización de la actividad a la que se dedicó Sócrates (muchas veces, encontramos en las universidades que un estudiante después de recibir unas pocas lecciones introductorias cree haber entendido cosas que Sócrates mismo declaraba no entender plenamente, ni menos poder explicar, aún después de muchísimos años de reflexión a tiempo completo, enriquecida con una larga experiencia de vida).

El buen Schopenhauer era un hombre muy sufrido, como puede verse en otro de sus libros escritos fuera de la Universidad, titulado Los dolores del mundo. De allí, diría yo, el tono de diatriba que no podía evitar, que tan difícil le hizo explicar sus ideas, y que tanto encantó a Nietzsche. No era un santo; no creo que casi nadie lo sea. Pero sus intenciones no eran malas. Tampoco creo que lo fueran las de Hegel. En el caso de ellos dos, me sentiría orgulloso y tranquilo si llegara a comprenderlos como complementarios en su época; creo que cada uno (al margen de su "éxito") tuvo y tiene algo que aportar, algo que merece ser escuchado y comprendido. No quisiera tomar partido en sus disputas, ni santificar a uno u otro, sino conocerlos y comprenderlos a los dos.

Cesar Zarzosa Gonzalez dijo...

Raul DC:

No estoy distorsionando nada. Estoy interpretando tus palabras, sin necesidad de mayor análisis:

"Fujimori mas bien sacó al país de un espiral de caos por la violencia terrorista y la crisis económica. Se corrompió rápidamente, pero el pueblo lo apoyó porque lo vió como una salida frente al desastre de políticas demgógicas promovidas por políticos que Humala admira y por la total inoperancia de los caviares de la época. La clase política del pasado también fue corruptísima pero no había videos para documentarlo (...) Que no se hagan los justos."

Eso es lo que no resiste mayor análisis: tus comentarios. No sólo desde el campo ètico, sino desde el campo jurídico. Ya que veo te interesan muy pocos los muertos, -pues solo hablas de corrupción- te dire que el sistema democratico fue capturado como lo que hace Chàvez. En ese sentido, Gonzalo tiene razón, lo de Fujimori presenta similitudes con Chàvez. Siendo asì las cosas, por lo pronto, el chavismo que nos debe preocupar ahora es el de Martha Chavez, quien tiene un pragmatismo que seguramente te va encantar.

saludos,

CZG

Gonzalo Gamio dijo...

Estimado Anónimo:

De Schopenhauer prefiero no opinar porque lo conozco muy poco; no voy a recurrir al argumento de la "herida". Personalmente prefiero mantenerme en una lectura anti-totalitaria de Hegel, que salta a la vista en la lectura directa de los textos. Hegel pretende conciliar la libertad subjetiva con el mundo ético. Habría que torcer los textos para postular lo contrario.

Raúl D.C. dijo...

Gonzalo: Te pido que reemplaces mi comentario anterior (aún no publicado) con el que te estoy mandando ahora. pues refleja de manera más complenta lo que pienso. Muchas gracias.

Nuevo comentario:

Mira César, haces una lectura selectiva, ideológica y malintencionada de mis palabras. Si digo que no justifico la corrupción quiero decir exactamente eso: no la justifico. Por otro lado, ¿Quién te ha dicho que porque explícitamente no condeno en este blog una serie de delitos concretos de algún gobierno significa que los apruebo o que soy indiferente frente a ellos? ¿Dónde has estudiado lógica? Tal vez sigues la lógica de aquellos que no les interesa la verdad sino la denigración de quien sostiene opiniones contrarias (lamentablemente ese es un vicio muy presente en TODOS los bandos políticos en el Perú).

El gran problema es que ahora se nos presentan tres opciones: Keiko, Humala o el voto nulo. Hay que decidir por el mal menor. Yo opto por Keiko no por considerarla ideal (no lo es de ninguna manera) sino por que creo que el peligro de Humala es mayor. Eso no me hace un partidario de la corrupción, ni contrario a la democracia, ni convalidador de crímenes como señalan intolerantemente tú, el marqués y su hijo y como parece deducirse de algunos de los comentarios de Gonzalo. Simplemente pienso que el otro candidato ofrece menos garantías y que el voto nulo implica enterrar la cabeza en un momento difícil.

Si quieres seguir interpretando antojadizamente mi posición en base a tus prejuicios es cosa tuya pero es una reinvención de lo que yo pienso.

Deivid dijo...

Siguen comparando a Humala con Hugo Chávez para denigrarlo, como si estar asociado al líder bolivariano fuera un crimen. Se nota que en este blog tanto los fujimoristas como los antifujimoristas no son más que unos burgueses acomodados. Sépanlo bien que Chávez es un gobernante que ha logrado recuperar la dignidad del contiente, que ha enaltecido la memoria de Bolívar, que ha sido el único que ha enfrentado al imperio y a la oligarquía pitiyanqui. Se horrorizan por la libertad de expresión, cuando todos sabemos que los medios están en manos de un monopolio de capitalistas vende patria que sólo buscan embrutecer al pueblo. No hay libertad de expresión para Deivid Juárez y Juan López sino para Baruch Ivcher y Genaro Delgado.

Ojala que Humala no se aburguese pues el Perú requiere cambios radicales y sólo alguien con decisión podrá lograrlo. Además, en alianza con Chávez, Evo, Ortega, Correa, esteremos cada vez más cerca de crear la ansiada patria indoamericana con la que soñó el ahora traicionado Haya de la Torre.
Para resumir: sus dicusiones no son más que el reflejo de la ilusión en la que vive una pequeña clase burguesa que está de espaldas a las grandes mayorías.

Anónimo dijo...

Así es,así es Gonzalo.La prensa fujimorata
renace desde las alcantarillas,con nuevas modalidades
pues.La última que ha sacado,no sabes,es la redacción
alcantarillesca por las mañanas combinando con cátedras alcantarillescas y por las tardes, modelos de lencería con la K puesta en la tanga naranja.
No está claro si es por Keiko o por Klein.
¿qué opinas?

Marcelo

Gonzalo Gamio dijo...

Estimado Marcelo:


Siempre tan festivo. Sí pues, renace la prensa fujimontesinista, y ahora aspira a mejorar sus posiciones de poder. Era de esperarse.

Saludos,
Gonzalo.

Anónimo dijo...

Respecto al anónimo que comenta lo de la "pequeña clase burguesa": Lo que dice es ambiguo y por lo tanto refuerza el temor que sienten muchos cuando piensan en Humala. Ante un comentario como el suyo, hasta el mismo Haya de la Torre tendría varias preguntas. Haya no lo rechazaría en primera instancia, pero sí le pediría que se explique un poco más. Esto lo puedo decir porque mi familia es muy cercana a Haya, somos parientes muy cercanos. Y, por si acaso, no tenemos absolutamente nada que ver con el gobierno actual, ni hemos obtenido absolutamente nada de él. Mejor no digo lo que a mi juicio pensaría Haya de este gobierno.

Humala ha causado y causa temor (quizá innecesariamente, y quizá este temor sea intencionadamente distorsionado, pero causa temor) justamente cuando se habla de "cambios radicales" sin dar mejores explicaciones, y cuando se habla de manera ambigua y exaltada, que deja dudas sobre si entre estos cambios radicales habrían algunos que recordaran a los de la Revolución rusa, o peor aún, a Stalin. Haya de la Torre hablaba mucho de la necesidad de no copiar al Socialismo Real, y esta necesidad era para él tan importante como la necesidad de no dejarse llevar por el "imperialismo". "Ni con Washington ni con Moscú", decía.

Otra: No prejuzguemos, aquí el lenguaje suena aburguesado porque la premisa es que el dueño de casa es un profesor universitario con un cierto tipo de formación, y él organiza la conversación con un cierto tono, y algunos... pues le entramos a ese tono, unos más, unos menos, en mi caso por el respeto que tendría por cualquier huésped y por las costumbres de su casa, a la que voy como invitado. Pero no es que el corazón lo tengamos tan acartonado como el lenguaje que usamos cuando estamos en el ámbito formal, ni que hablemos así en casa, tampoco. Y ojo, Haya hablaba así, y Mariátegui también.

Pero más importante aún, y más allá del lenguaje, pues sí, muchos aquí y en muchos sitios pensamos que para evitar a Stalin y a Hitler, y sus derivados y afines, y para evitar los campos de concentración, etc. etc., hay que cuidar la democracia y la libertad de expresión. Con todos sus desperfectos.

(continúa)

Anónimo dijo...

Lo más triste de la coyuntura actual es que ambas opciones, la O y la K, para el bando contrario implican el riesgo de ese tipo de violencia, y aunque nada puede asegurarse, muchos presienten excesos de Estado en el próximo gobierno, desde excesos sutiles hasta excesos catastróficos. Con los cuales, por ejemplo, Haya no hubiera estado de acuerdo jamás. No me incluyo entre ellos, pero muchos de mis parientes, Haya incluido, estuvieron dispuestos a ir presos incluso por defender la democracia. Yo soy más prudente, pero si puedo escoger, escojo la democracia, y si puedo hablar, la defiendo. Digo "si puedo", porque soy completamente vulnerable, tal como Deivid Juárez y Juan López, no crea que tengo mucho más que ellos.

En cuanto a Humala, yo no le temo gran cosa, porque tengo buenos amigos dentro de su partido que me dan una idea democrática, y conozco empresarios incluso que (teniendo información de adentro) dicen que si entra Humala no hay ningún problema, no pasa nada... Pero con expresiones tan ambiguas como la suya, ¿cómo podría yo defender a Humala en mi entorno social y laboral, y recomendar a mi familia su defensa pública? Creo que la ambigüedad de expresiones como la suya refuerza el temor a Humala y es utilizada por quienes intencionadamente potencian ese temor.

Mejor tómese un poco más de tiempo, sea solidario con nosotros, y explíquese, explíquenos. En serio: Enséñenos un poco, enséñenos cómo imagina usted un gobierno de Humala, explique por qué no habría que temerle, si es que en efecto no habría que temerle (eso está tratando de hacer Gonzalo, me parece). Si el plan no es inclusivo, estoy bastante seguro de que Haya de la Torre no estaría de acuerdo con usted. Él justamente creía en el diálogo a nivel de todas las clases sociales, no había una clase a destruir o excluir. Defendía mucho a la clase media y a los intelectuales por ejemplo (ese pequeño grupo burgués), no los hubiera eliminado ni torturado para salvar a los más pobres o a los proletarios. Haya tenía también parientes en las clases altas, a quienes nunca "traicionó", sino que hasta el final trató con el mayor respeto y/o cariño, según se lo merecía cada uno en cada caso.

No todos los burgueses son malos, estimado amigo. No todos, eso le puedo decir. Haya venía de la clase aristocrática de Trujillo, y Mariátegui de la clase burguesa limeña. Ya ve usted. Vallejo, amigo de Haya, era un burgués intelectual. Y, obviamente, la lista es interminable. Todos ellos contribuyeron también a este país.

El mayor riesgo de la coyuntura actual es sentir que el conflicto, a solucionarse por medio de la fuerza, es la respuesta. Esto es lo que tanto nos asusta. Ese no era el proyecto de Haya, por lo menos. Así no era su Indoamérica. En su Indoamérica todos teníamos cabida, aunque teníamos por cierto que aprender algunas cosas, por las buenas.

Entonces, por favor, como le digo, tómese un poco más de tiempo, y explíquenos mejor. El diálogo es un sano ejercicio, se lo aseguro. A muchos de nosotros aquí nos interesa el bienestar de las grandes mayorías, y muchos por el tipo de trabajo al que nos dedicamos (pensar) tenemos que pasar mayores estrecheces que si nos dedicáramos a hacer algún tipo de negocio, por ejemplo.

Cesar Zarzosa Gonzalez dijo...

Raul DC:

No te hagas la víctima pues. Cada quien es esclavo de sus propias palabras. Y nadie hace una lectura selectiva; son tus propias palabras. Si quieres te copio todo el texto de tu primer comentario y llegaremos a la misma conclusiòn. Eso es tener una lectura ideologizada?¿A ver cuentamente que significa eso para ti?

Acá el que enturbia el debate, eres tu. Llamas "caviares" a los defensores a los derechos humanos. Llamas socarronamente "Marquez y su hijo" a Vargas Llosa supongo y te quejas de que el resto (supongo te refieres a los anti-K) son los que denigran.¿Como quieres que te califique con esa actitud? Se podria debatir mejor de hecho. Pero con tu nivel de debate no esperes mas de lo que tu mismo das.

De otro lado, tu si que haz llevado un curso de lógica: "No estoy a favor de la corrupciòn, no estoy a favor de la dictura, no estoy a favor de la violaciòn de derechos humanos... por eso... Votare por Keiko Fujimori! Eres realmente genial...

Finalmente, porque como dices no hay que enterrar la cabeza en segunda vuelta, como tu mismo dices, es que votare por Humala. Porque hay que enfrentar la "lògica" perversa del fujimorismo, para que no se repita como hasta hace 10 años. Finalmente, no te estoy reinventando al decir lo que pienso de tus ideas... pero realmente seria ideal que tu mismo te reinventes.

saludos,

CZG

Raúl D.C. dijo...

Tus palabras confirman lo que decía. Es claro que los fujimoristas no tienen el monopolio de la intolerancia y de la manipulación del lenguaje. Tú eres un claro ejemplo de ello.

Anónimo dijo...

En un blog monatquista dicen que Keiko representa un liderazgo enemigo del orden burgués cuando el gobierno del chino impuso el neoliberalismo y vendió el país al poder económico extranjero.

También dice que el fujimorismo recapitula el catolicismo, cuando los fujiratas robaron a forro y cometieron crimenes.....locazo.

Anónimo dijo...

¿Cuál es el blog monarquista que dice eso de Keiko y del fujimorismo?

Gonzalo Gamio dijo...

Estimados Raúl y César:

Creo que el intercambio vuestro no prosperará si continúan discutiendo acerca de cómo se interpreta las ideas del otro. Es mejor aludir a temas específicos (DDHH, corrupción, políticas sociales) y examinar las perspectivas en ambas candidaturas.

Saludos,
Gonzalo.

Gonzalo Gamio dijo...

Estimado Anónimo:

Interesante tu análisis sobre el rol progresista de lo "burgués" en el grupo norte (Vallejo, Haya) y Mariátegui. Curiosamente, el pensamiento de Haya ha estado prácticamente ausente en todo este tiempo.


Saludos,
Gonzalo.

Cesar Zarzosa Gonzalez dijo...

Estimado Gonzalo:

Como no, volvamos a las cuestiones de fondo. Mi intención era remarcar claramente lo que se decía. Lo de las "interpretaciones es un artilugio de quien no es capaz de defender sus propias ideas.

Por otro lado, explicar las razones del rechazo a un proyecto fujimorista son larguìsimas y escapan a este espacio. Es quizà motivo de un post, como tu lo vienes haciendo. Cabe señalar para comenzar que màs importante que la dinámica del mercado son las propias instituciones. Sin instituciones no hay mercado que pueda funcionar adecuadamente siquiera. El sistema en sí está en peligro.

Sobre la menospreciada corrupción en la epoca del fujimorato, no hay punto de comparación con ningún gobierno. Y sus costos, para hablar en tèrminos económicos, son altísimos. Hablamos de miles de millones de dólares en pérdida. Respecto a que la hija no es su padre, es un argumento tan infantil, como afirmar que la hija está rodeada de la misma gente que lo estuvo su padre, a excepción, claro está, de Montesinos que está en la carcel -por el momento-.

Si esa cùpula y las ideas que encarna Rafael Rey -de quien tuvimos oportunidad de evaluar en tu blog, su fomentado decreto de impunidad- vuelven, serìa el peor desastre para el pais: el envilecimento de su moral. El espacio sigue quedando corto,

saludos cordiales,

CZG