viernes, 10 de junio de 2011

ALIVIO







Gonzalo Gamio Gehri







El proceso electoral ha concluido ya, gracias a Dios. Tengo que decir que siento alivio por el resultado. Alivio más que algarabía. No voté por Humala en primera vuelta, pero lo he apoyado desde aquí en la segunda vuelta. Me parece que ha llevado bien su campaña, que ha afinado su discurso y que ha convocado a gente inteligente y valiosa, que inspira confianza. Lo que más me satisface es que se ha vencido – aunque por poco – al fujimorismo, a pesar de que la candidatura de Gana Perú tuvo a prácticamente toda la prensa escrita en contra (y a toda la TV) y de haber contado con la intromisión reiterada del Presidente García y del Cardenal Cipriani, personajes que debieron observar rigurosamente el principio de neutralidad en un período de elecciones.


Como he señalado, un eventual retorno del fujimorismo al poder habría significado un funesto mensaje de impunidad y tolerancia ante la corrupción y las violaciones de derechos humanos, luego de que un ex presidente ha sido condenado por un tribunal independiente a causa de su participación en la comisión de tales delitos. Tanto Keiko Fujimori como sus principales compañeros de partido y socios calificaron como “errores” estos crímenes, y sólo reconocieron el carácter delictivo de tales actos – e improvisaron una tímida “petición de disculpas” – en la etapa final de la campaña, cuando quedaba claro que un deslinde con el régimen de su padre constituía una condición imprescindible para tentar lograr la Presidencia del Perú. La inclusión en el debate público del oscuro tema de las esterilizaciones forzadas – que un extraño comunicado arzobispal intentó soslayar en las últimas semanas – cuestionó severamente la posición del fujimorismo en temas de derechos humanos, y las terribles declaraciones de Jorge Trelles y Rafael Rey sellaron el fracaso de esa aventura política. Esta situación ha puesto de relieve que las cuestiones de ética pública (corrupción, observancia de la democracia, derechos humanos) han cumplido un rol importante en los debates de la campaña – a nivel de las fuerzas políticas y de la opinión pública – al lado de temas no menos importantes como la conducción de las políticas sociales y económicas o las condiciones de gobernabilidad.


Considero que la derrota del fujimorismo ha supuesto hoy la derrota de un cuestionado proyecto de (re) confesionalización del Estado y de diferentes espacios de la sociedad; Raúl Tola ha descrito este proyecto en un artículo titulado El peligro de una teocracia, la disposición del fujimorismo a jugar en pared con el ultraconservadurismo religioso – nuevamente revísese el comunicado cardenalicio a favor de sacar el tema de las esterilizaciones de la conversación cívica – y darle un gran espacio (completamente extraño en un Estado democrático y laico) en materia de salud y de educación, y quizá en líneas generales de conducción del Estado (véase la nota de El País sobre la discutible intervención de las Iglesias en la campaña política peruana). El intento de formar, dice Tola, “ un gobierno donde la necesaria separación entre Estado e Iglesia pasará al olvido, y muchas de las políticas nacionales serán dictadas a partir de un dogma único e incontestable. Una teocracia”. La publicidad de Keiko Fujimori en Puno – donde aparecía acompañada por una imagen de la Virgen de la Candelaria – parecía sugerir que se trataba de poco menos que de “la candidata de Dios”. Y los desvaríos de ciertos blogs y otros medios fujimoristas parecían respaldar aquella estrafalaria sugerencia. Quienes vestían con esos ropajes espirituales a ese grupo político pretendían soslayar el caso de las esterilizaciones y otros atropellos contra la vida humana perpetrados bajo el fujimorato. Ahora que las aguas han vuelto a su nivel, esos proyectos de tutelaje se van replegando (por ahora) y los alegatos religiosos retornan a los espacios de la fe y las asociaciones voluntarias organizadas en ese ámbito, en el marco de las exigencias de una sociedad plural y de un Estado laico.


El resultado de las elecciones produce tranquilidad luego de una campaña virulenta. Pero, cuidado, el alivio no supone la suspensión de la crítica. La victoria de Ollanta Humala, aunque esperanzadora, no extingue las dudas que existían en torno a un eventual gobierno suyo. Tampoco se han disipado las dudas que giran en torno a su trayectoria. El ganador debe saber que el apoyo que le han dispensado muchos ciudadanos se debe a los compromisos que ha contraído con el país en lo referente al respeto del Estado de derecho, la negativa a la reelección y la propuesta de un gobierno de concertación. El presidente electo debe saber que los ciudadanos estaremos pendientes de que cumpla con la palabra empeñada.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Y no se olvide de aquel blog reaccionario alcantarillesco en el que señala que Keiko luchaba contra el orden burgues, cuando su papi destruyó los derechos de los trabajadores.



T

Gonzalo Gamio dijo...

Hola T:

Efectivamente, sostener que el fujimorismo es un grupo político anti burgués, luego de arrasar con los derechos laborales, o que es católico, luego de sus delitos contra la vida, es simplemente ridículo, y constituye una ofensa a la inteligencia y la memoria de los peruanos. El cristianismo no es la estampita, sino el amor y el compromiso con el que sufre.

Algunos conservadores dicen que el apoyo de Rafael Rey y de Lay debió asegurar el voto católico y evangélico; no tienen idea de lo que acontece en esas Iglesias y las discrepancias con estos personajes en su interior. E incluso sugieren que el voto limeño refleja el voto "de las clases educadas". Una sugerencia discriminadora y agraviante contra las provincias del Perú, que han decidido el ganador de esta elección.

Saludos,
Gonzalo.

Anónimo dijo...

bueno, en cierto modo, ahora se puede respirar un aire de tranquilidad, las aguas se han calmado, aunque no del todo; porque después de los resultados, cómo le han jorobado la vida a Ollanta, que incluso le llego a decir que por su culpa la bolsa de valores de Lima habia caído tan bruscamente,los resultados ni siquiera se habian dado al 100%, pero ya le estaban pidiendo que muestre pruebas concretas de que va llevar al pais por buen sendero. lo bueno es que a pesar de la viscisitudes se ha mantenido en calma, pues la paciencia es un árbol que cuando crece causa muchos estragos pero sus frutos son dulces; creo que Ollanto ha sabido manejar todo este alboroto y ha empezado con pie derecho, este viaje por latinoamerica es una buena señal de que al hombre de verdad le interesa las buenas relaciones y la inclusion social que a ciertos personajes les incomoda. prueva de que se va a luchar por la concertacion es las declaraciones que ha brindado hoy la sra Espinoza a CPN. no obstante este mensaje no quiere decir que si ocurre alguna tergiversacion, corrupcion o violacion de derechos humanos durante su goobierno nos vamos a quedar con lo brazos cruzados, no señor, asi como le hemos confiado nuestro voto, nuestro futuro de cierto modo, etc, al final le pediremos cuentas, espero en que todo salga muy bien.

J.C.O.S.R.

Anónimo dijo...

Estimado J.C.O.S.R.

Yo no puedo respirar ningún aire de tranquilidad
con Humala como presidente electo.
Evidentemente usted no quiere admitir los peligros
que implica ese sujeto por su oscuro pasado.
Yo no lo pretendo convencer porque como dicen
no hay peor ciego que el que no quiere ver.
Pueden ser varios motivos,o bien,hay gente muy tonta y no se da cuenta de nada,o bien hay gente convenida que sólo se da cuenta de las cosas,las critica,las denuncia y se rasga las vestiduras,pero eso se da exclusiva y misteriosamente cuando hay un interés de por medio,de manera directa o indirecta.
En cambio,la gente que no es ninguna sinverguenza,
no excluye o clasifica la crítica y su intensidad en función a sus intereses personales.

Saludos,
Marcelo

Anónimo dijo...

Yo fui uno mas que voté por Perú posible, y al final voté por Gana Perú....sí siento tranquilidad porque perdieron los fujimoristas pero eso no significa que no haya que criticar a ollanta y tampoco tengo que ver con el gobierno electo.

no todo tiene que ver con la conveniencia o ser tonto, también elejir el menor mal.

Gonzalo Gamio dijo...

Estimados Marcelo y J.C.O.S.R.:

También existe el voto en contra. Humala o Keiko Fujimori, uno de los dos iba a ser el próximo presidente. Frente a ello, no podía ser neutral. He explicado porqué el fujimorismo ne parece inaceptable, y porqué creo que el gobierno de Humala permitiría una mayor fiscalización. Él ha moderado su discurso y se ha rodeado de gente técnica y progresista. Esto no disipa las dudas, pero convierte a Humala en un candidato preferible a Fujimori. Nada de eso implica suspender la crítica o eventualmente no hacer oposición. Me remito a los precedentes. Voté por García en la segunda vuelta del 2006 y lo critiqué como consta aquí.

Siempre he seguido una línea personal de pensamiento y de acción. He criticado el inicial proyecto nacionalista (2006) desde "La República":

http://www.larepublica.pe/07-03-2006/humala-y-la-visceralidad-nacional

Así como diferentes posts más recientes sobre las elecciones de este año.Por ejemplo:

http://gonzalogamio.blogspot.com/2011/04/un-dilema-tragico.html

http://gonzalogamio.blogspot.com/2011/04/en-la-vispera.html

Así que el tema está claro. Aquí no hay posts publicitarios partidistas ni he colocado propaganda electoral - como en otros blogs - y nunca he usado la pluma para someterla a un medio adicto a un régimen o facción (mi contribución a "La República" fue académica y ad honorem, además). Nunca me ha guiado esa clase de interés. Mi vocación es la filosofía práctica y en un nivel cívico, la universalidad de los derechos humanos. No he sido, no soy ni seré un "intelectual orgánico". Siempre he procurado pensar en libertad.

Saludos,
Gonzalo.

Anónimo dijo...

Hola Gonzalo,

Los que te conocemos,sabemos que eres una persona
correcta,eso está muy claro.No necesitas vanagloriarte de tu inmaculado pasado.

Sin embargo,todo el mundo es susceptible de duda
y sospecha,digamos que no existe algo así como puntos Bonus en la moral,que se acumulan para el futuro.Uno no puede-finamente-poner las manos al fuego ni por Ghandi ni por nadie,sólo en el mundo
de la fe se da esto,y este no es el caso.

Humala ya fue elegido y el Keiko está fuera de juego felizmente,eso ya lo sabemos!
Lo que me resulta extraño es que no puedas utilizar un lenguaje sin fujimorismo ,como pidiendo que por favor solamente se te compare con lo
peor.

Marcelo

Gonzalo Gamio dijo...

Hola Marcelo:

Estamos de acuerdo. Veremos qué sucede con este nuevo gobierno.

Saludos,
Gonzalo.

Anónimo dijo...

me parece muy interesante el punto de vista expuesto...

Anónimo dijo...

Sr Marcelo:

"no hay peor ciego que el que no quiere ver" casi perfecta frase para hacer creer que solamente el lo menciona tiene la razón. cada ser pensante tiene un punto de vista diferente por tanto si no convergemos todos de la misma manera, en cierto modo todos sufrimos de cierta miopia; la visión que poseemos en nuestro interior sobre el el pasado no es la única que se puede esperar para el futuro.
sr Marcelo, si guardo cirto gusto porque Ollanta haya ganado las elecciones, es porque creo que el hombre a mi criterio y supongo que esto tambien lo comparten muchas personas: Ollanta ha mejorado y acojo aqui las palabras de Gamio, se ha rodeado de gente progeresista, que anhelan mejorarno el pais. además estaremos pendientes de todo lo que ocurra durante su gestion.

J.C.O.S.R.

Anónimo dijo...

señor J.C.O.S.R.

El relativismo siempre va a ser útil para
desacreditar al otro,es muy simplón su argumento.

La frase mencionada,va dirigida a ser condescendientes
con un próximo gobierno liderado por un personaje
tan cuestionado y minimizar las peligrosas dudas que muchos afirmaron que exisitían al ser candidato.

Marcelo