martes, 26 de noviembre de 2013

LA DEBILIDAD DE LA POLÍTICA







Gonzalo Gamio Gehri

Ayer tuvo lugar en la capital un proceso electoral extraño y percibido como innecesario. Un proceso generado y precipitado por los operadores de una amplia campaña de revocación y por la obsesión de Castañeda Lossio por volver al sillón municipal antes de tiempo. Preocupa la deserción de tantos votantes, así como la renuencia – con elementos de irritación y de abierta hostilidad – de muchos ciudadanos a convertirse en miembros de mesa ante el manifiesto abandono del puesto por parte de las personas seleccionadas. En algunos casos, sólo la presencia de un fiscal o de un policía lograba persuadir a los votantes a convertirse en Presidente o miembro de mesa.

Este es un grave síntoma de rechazo ante el compromiso ciudadano – no es simple caso coyuntural escepticismo político -, pero hay más. Revela una profunda incredulidad frente a la corrección y la utilidad de los procedimientos democráticos. Si a esto sumamos una particular tibieza y proclividad ante la posibilidad de suscribir posiciones autoritarias – una actitud presente en una buena parte de nuestra población –, el panorama se torna sumamente complicado. Tenemos a un ex presidente condenado por crímenes de corrupción y violaciones de derechos humanos, y a dos ex mandatarios investigados por supuesto enriquecimiento ilícito y malos manejos en torno a la política de indultos. A muchos de sus seguidores la situación de sus líderes no los conmueve ni perturba; muchos compatriotas consideran que las prácticas corruptas son parte del quehacer político, o pueden ser disculpadas discretamente a cambio de cierta eficacia gubernamental en materia económica o de seguridad. Que exista alguna suerte de “racionalidad” – un concepto unilateral, concebido en términos del escueto cálculo costo / beneficio – detrás de estos fenómenos no resuelve el problema.  Nunca han faltado quienes sugieran que la servidumbre voluntaria constituye un  extraño “bien”.

Actualmente las fuerzas políticas se acusan recíprocamente de acoger operarios de Vladimiro Montesinos en sus filas. Parece claro que tanto el APRA, Fuerza Popular como Gana Perú manifiestan alguna forma de influencia del entorno de Montesinos, si tomamos en cuenta las evidencias y los indicios disponibles. Constituye una absoluta expresión de descaro que el fujimorismo – en la persona del propio Alberto Fujimori y en la de su hija y sucesora en el timón de su agrupación - denuncie la presencia del montesinismo en el oficialismo, si fue precisamente el régimen de Fujimori el que ungió de un poder casi ilimitado a su asesor y gobernó con él a lo largo de una década completa. Es impresionante la condescendencia - o, acaso,  la complicidad - de la prensa conservadora frente al estridente cinismo de los fujimoristas en esta materia. La percepción de la existencia de una compleja red de corrupción en prácticamente todos los espacios de la política nacional desmoraliza severamente a los ciudadanos, quienes a menudo sienten que los circuitos de corrupción e impunidad son inevitables en el sistema político y asumen una actitud de funesta tolerancia frente a sus prácticas y manifestaciones. Esta actitud robustece a su vez la disposición de muchos políticos a servirse del poder para obtener ilegalmente beneficios. El descrédito de la acción política afianza un sentimiento de impotencia cívica que sólo favorece a quienes están interesados en que las cosas continúen como están. La política como tal se debilita, y esta situación sólo alimenta la concentración del poder por parte de quienes - desde el Estado o desde los partidos - hacen uso de él sin vigilancia ni controles institucionales realmente eficaces.

8 comentarios:

Alfredo P. dijo...

"Un proceso generado y precipitado por los operadores de una amplia campaña de revocación y por la obsesión de Castañeda Lossio por volver al sillón municipal antes de tiempo."

El amplio descontento de la ciudadanía de Lima en contra de un gobierno municipal de izquierda percibido como incompetente e inepto (y hasta corrupto), también tiene un papel en esta revocatoria, ¿no crees?.

Gonzalo Gamio dijo...

El descontento no fue tan amplio como para revocarlo. Hoy ese gobierno municipal continua trabajando. Luis Bedoya ha tildado de "bellacos" a a partida de revocadores. Y ha acertado. Es necesario revisar la ley de revocatoria e incorporar causales para no convertirla en un insano recurso revanchista, como sucede otros lugares del Perú.

Alfredo P. dijo...

El titular del blog parece empecinado en negar a los dos más grandes fracasos de la izquierda peruana en lo que va del siglo XXI: 1.- su fallida CVR (cuya "verdad revelada" en su "libro sagrado" -el IF de la CVR- sólo fue aceptada por una reducida comunidad de creyentes conformada por ...ellos mismos) y 2.- la catastrófica "gestión" (por llamar de alguna manera al paso de la izquierda por el municipio limeño) de Susana Villarán en Lima.

Ahora nos quiere convencer (y se quiere convencer a sí mismo) de que el descontento contra la performance de la izquierda en Lima no fue tan amplio como para revocarlo: Esta señora se salvó por un pelo de la revocatoria, fundamentalmente gracias al apoyo del PPC y a la millonaria campaña publicitaria efectuada por un marketero brasilero que hasta ahora no se sabe cuánto cobró por sus servicios ( apropósito, ¿sabes cuánto gastó la izquierda susanista por salvarse de la revocatoria en Lima?, ya estamos a fines de año y hasta ahora no sueltan las cifras), aún así, no obstante el apoyo pepecista y la millonaria campaña publicitaria, la mayoría de los regidores de la izquierda fueron expectorados de sus cargos (merecido castigo a tanta ineptitud e incompetencia).
"Hoy ese gobierno municipal continua trabajando": No hay peor ciego que el que no quiere ver.
El domingo pasado, el pueblo de Lima le quitó a la Sra. Villarán la mayoría que la izquierda mantenía en el Concejo, de 22 regidores, pasó a tener (hasta el momento)....sólo tres (3).

Ese "gobierno" del que hablas, ya no existe; sólo queda la Sra. Villarán y tres regidores de la izquierda más radical y recalcitrante que no son de "Farsa Social" (partido que legalmente ya no existe) sino de "Tierra y Dignidad".

Es interesante hacer un paralelismo entro ambos sonados fracasos de la izquierda peruana: tanto el fracaso de la CVR como el fracaso del paso de Susana Villarán por el municipio son negados por la izquierda. En ambos episodios, la izquierda terminó por aislarse de la realidad y por radicalizándose aún más: aquellos que muestran sus dudas y sus reparos frente a la CVR de la izquierda, inmediatamente son tildados de "mafiosos", "apro-fujimontesinistas" y demás epítetos, igualmente, cuando alguien lanzaba alguna crítica hacia la gestión izquierdista en Lima, sólo recibía insultos por parte de los izquierdistas más convencidos.Insultar a quiénes debería buscar convencer es una constante de la izquierda en ambos episodios.
Tanto la presentación del libro sagrado (el IF de la CVR) como la elección de Susana Villarán en Lima, fueron presentados como momentos fundacionales, como el inicio de una nueva era; ante el evidente fracaso de estos, la izquierda trata de defenderlos haciendo mención a supuestos planes de "largo plazo" (como eso de que su CVR es un "punto de partida" para la "reconciliación" o eso de que han buscado "construir ciudadanía" en Lima).
Finalmente, en ambos episodios la izquierda ha exhibido su doble moral: 1.- llenarse la boca hablando de "respeto a los DD.HH" y denigrar a una mujer congresista sólo porque busca revisar su libro sagrado (apropósito, hasta ahora no te he visto pronunciarte en contra del inaceptable bullying efectuado en contra de la hija de Martha Chávez por alumnos del campus de la que fuera alguna vez una universidad pontificia y católica).
2.- denigrar a una institución como la revocatoria de autoridades, cuando dicha institución fue incorporada a nuestra legislación...por ellos mismos! (la revocatoria es buena cuando no me toca o le toca a mis enemigos, pero si tocan a una de los míos, allí sí es mala).

En vez de practicar la política del avestruz, la izquierda peruana debería revisar estos dos grandes errores y tratar de aprender de ellos.






Gonzalo Gamio dijo...

Nuevamente, intentas confundir a la gente distorsionando los hechos y atribuyéndome cosas que no he planteado. No niego que haya descontento en un sector de la población frente a la gestión de FS en la capital, pero de allí a desconocer las cosas que se están haciendo hay un abismo. Es un hecho que la revocatoria fracasó, y existe un acuerdo entre los diversos partidos que tienen representación en el consejo de la ciudad.

Lo de la CVR es algo que ya se ha discutido aquí. Alteras el mensaje del Informe sistemáticamente. Lee primero, y luego discutimos con las citas en la mano.

Anónimo dijo...

Alfredo P. ,

Nadie más opuesto que yo a la mala gestión de Susana Villarán (y a su agenda ideológica que se concentra más en las campañas pro-gay que en los problemas reales de la ciudad). Sin embargo, yo creo que la revocatoria (iniciativa introducida por la izquierda) es nefasta para un país con instituciones tan débiles como el Perú. Considero que si eliges mal, entonces debes soportar a tu gobernante, salvo en casos muy específicos (delito comprobado, incapacidad física, etc).
Ojala que esta sea una ocasión para derogar esa norma tan nociva. Más allá de ser de izquierda o de derecha hay que pensar en el bien común del país.

Gonzalo Gamio dijo...



Sobre lo de Martha Ocampo. Acabo de enterarme a través de algunos colegas y es inaceptable que la hostiguen por las opiniones de un familiar. Eso es incompatible con los principios de la ética pública. Toda mi solidaridad con ella.

Alfredo P. dijo...

"pero de allí a desconocer las cosas que se están haciendo hay un abismo."

¿Vives en Lima?, ¿De qué obras hablas?, ¿No te referirás al tunel Santa Rosa entre SJL y Lima? (ese que lleva tres años parado), ¿tal vez te refieres a sus obras en la playa La Herradura? (esa en donde la arena se la llevó el mar), ¿o al catastrófico operativo de La Parada? (con cuatro muertos, saqueo de mercadería por vario cientos de millones de soles y una humillación para la sufrida Policía Nacional), ¿tal vez te referirás a las Obras de la Costa Verde? (que esta señora pospone a cada año), Ya está! de seguro te refieres a la famosa "Reforma del Transporte" (ese mantra que repiten los susanistas en su desesperación al ver que pasa el tiempo y no hacen nada para la ciudad como buenos izquierdistas que son).

¿De qué obras hablas?, menciona alguna.


"Es un hecho que la revocatoria fracasó," Interesante tesis, explícasela a Marissa Glave y a Jaime Zegarra, a ver qué les parece a ellos eso de que la revocatoria "fracasó".

"existe un acuerdo entre los diversos partidos que tienen representación en el consejo de la ciudad." Verdad! de seguro te refieres a ese mamotreto repleto de lugares comunes y ambiguedades que el susanismo bautizó como "Gobierno de Ancha Base", ese mismo que desde marzo pasado hasta ahora vienen incumpliendo.

"Alteras el mensaje del Informe sistemáticamente. Lee primero, y luego discutimos con las citas en la mano."

ya han pasado más de dos años desde que dijiste que ibas a citar los versículos precisos de tu libro sagrado para refutar mi posición respecto a que la CVR de la izquierda fue muy "blanda" y "comprensiva" con el nefasto accionar de la izquierda peruana frente al accionar del terrorismo comunista y hasta ahora no has cumplido.

http://gonzalogamio.blogspot.com/2011/03/derechos-humanos-recuerdo-y-olvido.html

¿por qué mientes tanto?.

Gonzalo Gamio dijo...

No voy a ponerme a discutir sobre las obras de esta gestión municipal, tanto las de infraestructura como lods proyectos de tipo cultural. Es una gestión polémica, sin duda, y eso en parte por quienes, como tu, dicen que la alcaldesa no ha hecho "nada". Que la revocatoria fracasó es un hecho.

Sobre la CVR y los partidos de izquierda,. El que miente eres tu. Revisa las conclusiones 105 a 113.