viernes, 1 de agosto de 2008

EN EL DÍA NACIONAL SUIZO



LA APUESTA HELVÉTICA POR EL ESTADO DE DERECHO CONTRA EL PELIGRO DEL CHAUVINISMO



Gonzalo Gamio Gehri

Hoy estuve en la Embajada de Suiza, en la reunión que ofrece la Confederación a los suizos del extranjero con motivo de la fiesta nacional helvética. Son ya 717 años de vida independiente (fue en 1291 que los cantones de Uri, Unterwalden y Schwyz consolidaron una alianza y lucharon exitósamente contra la casa de los Habsburgo, que regentaba el Imperio germánico. Los cantones triunfantes establecieron una Confederación de comunidades libres, sin monarquía ni aristocracia). Esta es la última reunión que preside el embajador Beat Loeliger, quien continuará sus tareas diplomáticas en Irlanda.

En su discurso, Loeliger comentó un acontecimiento importante, que destaca el espíritu democrático de la Suiza actual. Quisiera compartirla con el lector, porque es interesante. Hace unos meses, se sometió a referendo la posibilidad de otorgarle competencias a las asambleas cantorales respecto de la decisión sobre los procesos de naturalización de los extranjeros (esta decisión recae sobre el Poder Ejecutivo). Esta propuesta se inscribe al interior de una poderosa corriente de opinión en Europa que percibe la inmigración como una suerte de “amenaza”; en la Comunidad Europea la posición conservadora está pesando mucho, como es de conocimiento general. Pues bien, esta iniciativa fue rechazada por el 65% de los ciudadanos suizos que votaron. La sociedad helvética es consciente del peligro que representa la xenofobia y el chauvinismo, que lleva a las comunidades a asumir conductas primitivas y violentas, como viene sucediendo en muchas regiones del continente. En tanto los procesos de naturalización están sometidos a la decisión del Ejecutivo, sus resoluciones son revisables por otras instancias. Si la decisión cayera en manos de una asamblea comunitaria, ésta – de acuerdo con la propia iniciativa – sería inapelable. Como observaba el embajador, este resultado expresa el respaldo ciudadano al Estado de derecho, yendo saludablemente en contra de la tendencia continental.

Una actitud liberal y progresista – respetuosa de los derechos de las minorías -, que puede servir de ejemplo en la región.

No hay comentarios: