Gonzalo Gamio Gehri
De acuerdo con notas publicadas ayer en La República y hoy en El Comercio, Mario Vargas Llosa ha conseguido persuadir a Alan García de que el gobierno peruano acepte la donación alemana para la construcción del Museo de la Memoria. De acuerdo con estos medios, García había pedido a Vargas Llosa que elabore una lista de intelectuales y especialista que podrían conformar un ‘Consejo de Notables’ que asesorase las actividades del Museo y la disposición de sus salas, teniendo como base la exposición Yuyanapaq. A juzgar por el pre-liberalismo autoritario que marca el imaginario personal de García – que se puso de manifiesto en sus declaraciones en torno al determinismo racial y climático en la conducta de los pueblos (planteado en sus recientes declaraciones) – el trabajo dialéctico de nuestro más notable de nuestros novelistas debió ser particularmente arduo. Jorge del Castillo ha sugerido que el propio Vargas Llosa - un reconocido intelectual independiente - presida ese ‘Consejo de Notables’. Considero que se trata de una excelente idea, siempre y cuando la Defensoría del Pueblo desempeñe el rol que le corresponde en este proyecto, conforme a ley.
Por ahora, las aguas parecen estar aquietándose en torno a este tema. Hace unos días, Ántero Flores Aráoz tuvo expresiones más positivas sobre Yuyanapaq, exposición que no había visitado antes. Señaló incluso que “la verdad es que había mucha objetividad". El ministro se ha rectificado respecto de sus duras palabras iniciales sobre la naturaleza de esta exposición. En realidad, la discusión política y mediática sobre el Museo de la Memoria se destacó por su insuficiente rigurosidad conceptual y por el grueso calibre de los términos empleados, especialmente por los “censores” del proyecto. El propio ministro señaló su carácter “suntuario” de la iniciativa frente a otras prioridades en materia de políticas públicas; no valoraba del todo la conciencia histórica como elemento constitutivo de la formación ciudadana. El Cardenal señaló que el proyecto era creación de una facción de la opinión pública y que el mismo “no era cristiano”; desde luego, el planteamiento del Museo no tiene estrictamente que serlo, en tanto está dirigido a todos los peruanos – a los creyentes en diversas confesiones, y también a los no creyentes – de quienes se espera fundamentalmente que compartan los principios y valores presentes en la Constitución Política. En fin, el debate estuvo a punto de diluirse en la negativa inicial del gobierno, y las declaraciones infelices de García sobre el poder del presidente y la tendencia “natural” de nuestro pueblo a la tristeza llevaron la atención de los medios en otra dirección.
No creo que haya que cantar victoria. No todavía. Esta primera aceptación no es irreversible (como no lo son muchas decisiones del Presidente). Es un primer paso en la construcción de un Museo que puede ser beneficioso para la promoción de la cultura de los Derechos Humanos y para la causa de la justicia en el Perú. Esperemos que el mandatario escuche a Vargas Llosa y no coloque a sus “amigos” y “colaboradores” – ya sabemos quiénes son – en el ‘Consejo de Notables’ del Museo. García ha aludido muchas veces a la necesidad de una “memoria ampliada” del conflicto armado interno: sospecho que el Presidente no ha leído el Informe Final de la CVR, ni ha visitado Yuyanapaq. Se ha referido en múltiples ocasiones al “malestar” que ha causado el Informe de la CVR en ciertos mandos militares, sectores de la “clase política” y otras autoridades.
Aunque creo – en consonancia con lo manifestado por los propios ex comisionados - el Informe Final es punto de partida y no de llegada en el proceso de justicia y reconciliación nacional, considero que aquí las partes del debate no están en la misma situación al interior de esta polémica sobre la memoria en el Perú. Estoy convencido que, en lo sustancial, a fuerza de los argumentos está del lado de la Comisión de la Verdad, mientras que sus "enemigos" políticos y mediáticos han recurrido sistemáticamente al ataque, y muchas veces a la infamia. La CVR publicó un Informe riguroso en cuanto a datos, estadísticas e interpretaciones acerca del conflicto armado. Su elaboración demoró dos años y recabó 17,000 testimonios. A esa extensa investigación interdisciplinaria, sus “objetores” sólo expresan su “malestar”, y alguna peregrina "intuición" , cuando deberían exhibir argumentos y material que los sustente. El malestar y la intuición no basta para plantear una crítica. Si se quiere sostener un debate, se debe debatir de verdad. No basta con enarbolar las columnas de Correo, Expreso y La Razón como si sus “trascendidos” y su trabajo de agitación y propaganda fueran argumentos y geninas investigaciones sobre el tema. No lo son en absoluto. Como he señalado en otro texto, los "objetores" de la CVR cuestionan el Informe con las manos vacías, y llenos de prejuicios. El genuino contraste de auténticos argumentos sí beneficiaría el esclarecimiento de la memoria en el país.
Quizá el Museo pueda convertirse en un espacio de reflexión serio sobre la recuperación de la memoria y la situación de los Derechos Humanos en el país.
Quizá el Museo pueda convertirse en un espacio de reflexión serio sobre la recuperación de la memoria y la situación de los Derechos Humanos en el país.
Disculpe el Off topic, pero saber sus apreciaciones sobre la entrevista de Bunge en Peru21
ResponderEliminar"Otro fue su acercamiento a la filosofía de Hegel, abstrusa y absurda. Hegel, a diferencia de los demás charlatanes –como Husserl o Heidegger, que no tienen problemas– sí se ocupó de temas importantes. Pero los trató mal"
http://peru21.pe/impresa/noticia/no-hay-reglas-plantear-problemas-ideas-nuevas/2009-03-28/242380
Me parece patético que alguien como Bunge tenga una opinión tan pobre sobre un gran filósofo como Hegel. Una pena.
ResponderEliminarSaludos,
Gonzalo.
P.D.: Y lo que dice el físico Bunge sobre Husserl y Heidegger es un disparate también. Un poco más de respeto con estos inssignes pensadores.
ResponderEliminarSaludos,
Gonzalo.
Habría que preguntarse xq en el mundo los filosofos de clase media y alta tradicionales son atraídos por husserl y heidegger. ¿Usted se lo ha preguntado? No digo que eso sea algo negativo, sino que me causa bastante curiosidad. Voy a hacer un minitrabajo en la cato para un curso sobre si hay una relación entre estratos socioeconómicos y paradigmas filosóficos.
ResponderEliminarPara que la investigación sea viable - y seria -, se tiene que conocer muy bien a Husserl y Heidegger.
ResponderEliminarSaludos,
Gonzalo.
Vayamos al tema del Post, por favor.
ResponderEliminarSe puede disentir de Bunge, en el sentido de creer que solo el conocimiento cientifico es confiable, y que lo demas es baba metafisica, no obstante ello, hay algo que me queda claro: que bien hace Bunge al debate, mientras hay otros que no se exponen y vinculan inteligencia con astucia, el viejo Bunge, a sus 90 años, aviva la polemica, incluso rechazo un honoris causa de san marcos en el 97 con el argumento valido de la intervencion dictatorial. Gonzalo, la agenda de discusion tambien puede ser consensuada.
ResponderEliminarestimado gonzalo gahmio
ResponderEliminarquiero hacerle dos preuntas muy importantes:
- quiero estudiar filosofia, pero tengo 30 años de edad. se que muchas veces se ha dicho que "nunca es tarde para estudiar", "la edad no importa"...pero esas son solo frases de consuelo o son ciertas?
-la otra pregunta es que tengo pensado estudiar filosofia o en la facultad de teologia pontificia o en la villareal, ¿cual de las dos me recomiendas?
espero tu gran ayuda.
Estimado Moisés:
ResponderEliminarEnvíame tu mail para contestarte. Con mucho gusto.
Saludos,
Gonzalo.
gracias gonzalo:
ResponderEliminarescribeme a caronte_barquero@hotmail.com
moises bobadilla