Gonzalo Gamio Gehri
Hace unos días participé en una
mesa redonda – organizada por IDEHPUCP – sobre Estado de miedo (2005), un documental de Pamela Yates sobre el
conflicto armado interno y sobre el trabajo de la
CVR. El evento se enmarcó en un ciclo de
reflexión en torno a La memoria
persistente. Participaron asimismo el historiador Jorge Valdez y el crítico
cultural Melvin Ledgard.
El documental presenta diversos
vacíos. El más grave es, definitivamente, la omisión de toda referencia al MRTA y
a sus terribles acciones contra la sociedad peruana. Se ha concentrado en el
actuar criminal de Sendero Luminoso, en la reacción del Estado, las fuerzas políticas y
la sociedad civil. Esa omisión no puede ser pasada por alto sin más. Otros
documentales y películas sobre el tema han sido más exhaustivos y rigurosos a
ese respecto. El valor del documental reside probablemente en la atención de
los testimonios de víctimas, actores y perpetradores, y a las reflexiones de
los entrevistados que se esfuerzan por elaborar una interpretación plausible
del conflicto. Aquí destaca el recordado Carlos Iván Degregori cuyos intentos
por esclarecer estas dos décadas de terror y represión fueran tan decisivos
para los trabajos de justicia
transicional en nuestro medio.
Resulta interesante asimismo el
lugar que el documental le otorga a la entrevista hecha a Beatriz Alva H.,
abogada y funcionaria pública durante los años del fujimorismo, luego comisionada
de la CVR. Ella
se presenta como una persona proveniente del sectores medios / altos de Lima, parte de un sector de la sociedad que vivió a espaldas de la
tragedia que padecía el peruano campesino, no hispanohablante, desamparado por el
Estado que debía proteger sus derechos y no cumplió con esa obligación. Hace un conmovedor mea culpa por su indiferencia de entonces y por sus compromisos políticos
en la segunda mitad de los noventa. Da
testimonio de los hallazgos de restos humanos y de su colaboración con trabajos realizados por los antropólogos forenses. Sorprende la intensidad de sus declaraciones.
Sostiene que “¿Dónde estaba yo?” durante aquel tiempo de miedo es la pregunta
que todo peruano debería formularse. El trabajo de Yates en general concentra
su atención en la debilidad del compromiso de los gobiernos, de los políticos y
de buena parte de la sociedad peruana respecto del destino de las víctimas.
Estado de miedo reconstruye aquellos años a partir de la exposición
de evidencias audiovisuales, la investigación en el lugar y las entrevistas.
Plantea las cosas en términos de una ‘batalla por la memoria’ que rescate los
testimonios de quienes vivieron y sufrieron el conflicto armado, contra el
parecer de la mayoría de los políticos en actividad (que estaban también en
actividad en aquellas décadas) que prefieren cubrir tales hechos bajo el oscuro
manto de la amnesia moral y política y la impunidad. En tiempos recientes, el
Movadef y la extrema derecha planteado la amnistía y la suspensión de
investigaciones en derechos humanos como medidas presuntamente “reconciliadoras”. En un país en
donde todavía existen cerca de cuatro mil lugares de entierro indebido sin
abrir, el esfuerzo por la memoria y la reparación, planteado desde el Estado y
la sociedad civil debería constituir una tarea fundamental si queremos sentar
las bases de una sociedad democrática.
La izquierda peruana e internacional tiene -hasta ahora- una actitud ambigua frente a la agrupación terrorista mrta, a la que ven todavía como unos "guerrilleros" románticos e idealistas en la misma línea que el psicópata de nacionalidad argentina Ernesto Guevara De La Serna (alías El Che). En comparación con sus parientes ideológicos de sendero luminoso, los del mrta serían menos sanguinarios, pero esta agrupación terrorista y criminal fue causante de muchas violaciones a los derechos humanos de los peruanos, como el secuestro y la tortura del empresario minero David Ballón Vera en 1992 (cabe destacar que la hija de este empresario minero secuestrado y torturado por el mrta, nunca fue invitada a las teatralizaciones programadas por la CVR de la izquierda bajo la excusa de "escuchar a las víctimas", porqué será???).
ResponderEliminarhttp://catarsisyharakiri.blogspot.com/2011/12/ruthie-ballon-el-estado-nos-ha-dado-la_27.html
El mrta también se dedicó a masacrar a travestis y homosexuales en las zonas de la selva que controlaba bajo la excusa de implantar una "moral revolucionaria".
Basta ver la reacción de la izquierda peruana no-gubernamental cuando se liberó a la terrorista norteamericana Lorie Berenson para hacer evidente esa ambiguedad moral frente al terrorismo comunista.
Finalmente es de denunciar el falseamiento de la historia que promueven este tipo de documentales al emplear los eufemismos de la CVR de la izquierda como eso de "conflicto armado interno" para denominar al terrorismo comunista desplegado por sendero luminoso y el mrta.
1) La CVR ha documentado rigurosamente los crímenes perpetrados por el MRTA, homicidios, actos de terrorismo y secuestro, entre otros. Las llamadas "cárceles del pueblo" eran infames. Revisa el capítulo, que no te hará ningún mal.
ResponderEliminar2) Es mejor opinar luego de ver el documental, lo encontrarás en youtube.
La hija de David Ballón Vera -Ruthie Ballón- nunca fue llamada por la CVR de la izquierda para dar testimonio de lo que el mrta le hizo a su padre,como ella denuncia en el link que puse, ¿qué casualidad no?.
ResponderEliminarNo conozco el caso - voy a revisarlo -, pero encontrarás en el IF-CVR un estudio serio sobre los crímenes del MRTA, así como testimonios de sus víctimas. Esas dudas se resuelven leyendo e investigando.
ResponderEliminarHay algún comentario del señor Alfredo P. que no contenga la frase "la izquierda peruana" o "la izquierda internacional"???
ResponderEliminarO sea, son en serio sus comentarios o se trata de un simple y funesto troll??
Si a mí, que me falta un ciclo para entrar a la facultad de filosofía y aún sigo en EE.GG.LL., me causa demasiada risa este sujeto troll, no puedo evitar pensar en las sinceras carcajadas que le generará a mi estimadísimo profesor Gonzalo Gamio, si es que acaso no pierde la paciencia ante tal infantilismo intelectual e ideológico del señor troll. Como diría zarathustra: "donde no se puede seguir amando, se debe pasar de largo".
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola Gonzalo, conoces algun enlace donde este el documental completo, he buscado pero no encuentro, saludos.
ResponderEliminarlo acabo de encontrar, si no tienes inconveniente coloco el enlace
ResponderEliminarhttp://vimeo.com/9858481
saludos
Equinoxe dice que todavía está en EE.GG.LL, entonces debe ser un jovencito socialconfuso que se ha creído esos cuentos de la izquierda sobre "conflicto armado interno" ó "violencia estructural" para disfrazar al terrorismo comunista que nos tocó padecer en los 80s y 90s (cuentos que ahora se difunden como "cursos" en la universidad que funciona en el fundo Pando de San Miguel y otrora conocida como Pontificia y Católica).
ResponderEliminarAmiguito, cuando salgas de tu torre de marfil y empieces a ver el mundo, comprenderás que tengo razón y que te han estado metiendo basura en la cabeza.
Cuando me gradúe, amigo, desearía estar a la altura moral de mis admiradísimos profesores Gonzalo Gamio, Miguel Giusti, Salomon Lerner, Ciro Alegría, Pepi Patrón, etc...
ResponderEliminarEquinoxe, ¿Y cuándo consigas trabajo?,(uno de verdad me refiero).
ResponderEliminar
ResponderEliminarMe parece que las insinuaciones de los comentarios de A.P. tienden a ser ofensivas y próximas a la actuación de un troll. Lo del "trabajo real" resulta revelador ¡significa que para acceder a un trabajo verdadero habría que renunciar a los principios o a la libertad de conciencia? espero que no.
Para tener un trabajo verdadero, primero hay que tener una profesión y trabajar en el mundo real, no en una burbuja.
ResponderEliminarLa imagen de la universidad como burbuja es tan ingenua como falsa.
ResponderEliminarEs una imagen correcta, en términos de contacto con la realidad y con el mercado laboral. Pensar en hacer carrera en el campus del fundo Pando, integrarse a las argollas y/o "coaliciones redistributivas" que ahora imperan allí, es creerse que la burbuja es la realidad.
ResponderEliminarLa universidad cumple una función, como los hospitales, los juzgados o las empresas. Todas esas instancias constituyen la "realidad". Pensar que sólo la "realidad" es la de la empresa es una lectura sesgada y falsa de las cosas. Y si se va a hablar de "argollas" o denunciar algo, que sea con precisión y sin ocultar el propio nombre.
ResponderEliminar